A principios del mes de junio, la dirección de la Biblioteca Pública del Estado (BPE) de Castelló anunciaba en sus redes sociales el nuevo horario de verano: del 17 de junio hasta el 13 de septiembre solo abrirá por la mañana, las tardes permanecerá cerrada.
Ayer, 27 de junio, la dirección de la Biblioteca Pública del Estado (BPE) en València Pilar Faus anunció, a través del mismo medio de comunicación, el cierre de la biblioteca todas las tardes del mes de julio. En esta ocasión en las redes sociales se indicaba claramente la razón: por falta de personal.
Según ha informado la dirección de la Biblioteca Pública del Estado de València al Col·legi Oficial de Bibliotecaris i Documentalistes de la Comunitat Valenciana (COBDCV) el problema viene de lejos, aunque, a partir de julio, se verá agravado hasta tener que tomar la decisión de cerrar por las tardes.
En la relación de puestos de trabajo de la BPE de València hay dos plazas de técnico en el turno de la tarde. La primera de ellas está vacante y sin cubrir desde el año 2016 y la segunda está ocupada por una persona que a partir del 1 de julio cambiará de puesto de trabajo porque ha recibido una mejor oferta. Según afirma la dirección, también está vacante la plaza de administrador y cuatro plazas más adscritas a la tarde, dos auxiliares y dos ordenanzas. Sin embargo, el cierre en horario de la tarde se produce por la falta de personal técnico en ese turno, sin este tipo de personal especializado la biblioteca no puede abrir al público.
Por último, la dirección de la BPE de València, una biblioteca que recibe al día una media de 2000 personas, afirma que el personal, tanto técnico como administrativo, ha demostrado una fidelidad con la institución encomiable, porque han soportado el peso de las vacantes con una dedicación sorprendente.
Las Bibliotecas Públicas del Estado forman parte del Sistema Bibliotecario Valenciano según la Ley 4/2011, de 23 de marzo, de bibliotecas de la Comunitat Valenciana. Son de titularidad estatal pero tienen su gestión transferida a las autonomías por lo cual son responsabilidad de la Generalitat Valenciana.
Sin personal técnico bibliotecario suficiente al frente de las Bibliotecas Públicas del Estado no se puede mantener su actividad y tendrán que cerrar espacios, servicios e incluso centros, y sin técnicos en la Subdirección General del Libro, Archivo y Bibliotecas de la Generalitat Valenciana no se pueden llevar a cabo las tareas de coordinación e inspección a la cual esta ley lo obliga y que las bibliotecas de la Red de Bibliotecas Públicas de la Comunitat Valenciana tanto piden. Y es que a la Subdirección también hay vacantes para cubrir.
El pasado mes de abril el COBDCV abría una campaña para reivindicar y transformar la imagen de las bibliotecas y los profesionales bibliotecarios que ha tenido mucha repercusión, incluso en el ámbito nacional. Las Bibliotecas Inquietas valencianas quieren implicación política hacia uno de los servicios más democráticos que tiene la administración pública, que facilita el acceso igualitario de la ciudadanía a la información. El COBDCV también pide la tan necesaria complicidad ciudadana.
El COBDCV quiere mostrar todo su apoyo a los técnicos de todos los servicios y centros que están trabajando duro por el acceso a la información y la cultura. Así mismo, exige que el Botànic II también los apoye con la planificación estratégica, la dotación de personal y de presupuesto y el cumplimiento de la ley de bibliotecas de la Comunitat Valenciana que mejoren unas instituciones que, año tras año, demuestran que son una inversión para toda la sociedad.